La semana pasada, el 25 de Febrero se cumplieron 7 años de la muerte de uno de los artistas más talentosos e innovadores que dio Argentina. Un guitarrista brillante, con un ingenio muy particular, que lo llevó a confrontar con mucha gente del ámbito, pero a la vez le permitió escribir canciones muy lúcidas como El Hombre Suburbano o El Viejo, que son apreciaciones detalladas de los tiempos que se vivían en los '70.
Me acuerdo del día del accidente como si hubiese pasado ayer. Acompañé a mi ex (en aquel momento novia) al hospital Fernández porque se había cortado la mano. Al volver, vimos que había quedado la tele prendida. Mientras ella fue a cocinar algo yo cambié de canal y al pasar por Crónica TV vi la noticia, bien reciente. Era de madrugada, pasada la 1am si no me equivoco.
La tristeza que me agarró no tiene explicación. No pude cambiar de canal, me senté y me quedé mirando y escuchando, tratando de entender qué había pasado, por qué se había ido tan prematuramente de este mundo uno de mis guitarristas favoritos.
Lo pienso hoy y todavía me parece una ridiculez la manera en que murió. Algunos dijeron en aquellos tiempos que había muerto en su ley, viviendo de la manera que a él le gustaba. Pero a mi ese argumento siempre me pareció una reverenda estupidez, tanto como la manera en que murió..
Por suerte lo vi tocar en vivo en dos oportunidades. Una en Hangar con Riff y otra en ND Ateneo haciendo un tributo a BB King junto a su baterista, Tony Coleman, y muchos músicos invitados del ámbito del blues local, que fueron desfilando a lo largo de toda la noche. Me hubiera gustado verlo más veces, tocando con Pappo's Blues sobretodo, pero tengo muy lindos recuerdos de aquellas dos noches.
En un post que había escrito sobre él, recorrí por arriba su carrera desde sus comienzos hasta los '90. Así que hoy simplemente voy a publicar uno de sus temas más conocidos pero en dos versiones en vivo. Se las recomiendo.
La primera, junto a Botafogo, uno de sus grandes amigos, y a Charly García, con quién había pasado enemistado una buena parte de su vida como artista. La versión que nos ofrecen es una genialidad y también de sus últimas. Me pone la piel de gallina escucharla...
La segunda es de unos 12 años antes aproximadamente, nuevamente con Don Vilanova (aka Botafogo) en guitarra, pero esta vez el Carpo en piano (con chicana a Charly en el medio) y las reinas del blues en Argentina, las Blacanblus, en coros.
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